La actualidad ha ubicado a las empresas en un escenario donde, sin más opción, tuvieron que replantear nuevas metodologías y criterios de trabajo bajo las tendencias corporativas post-pandemia. La cultura de trabajó cambió y en muchas ocasiones se crea un abismo entre los colaboradores y las empresas que no se adaptan a la evolución.

El camino para las mismas exige diseñar una estrategia que involucre potenciar el vínculo con sus colaboradores y por consiguiente un rendimiento positivo para todos. El propósito está en crecer firmemente cumpliendo las metas bajo una cultura organizacional que involucre a todo el equipo.

Ahora bien, ¿De qué trata la cultura startup?

La cultura startup prioriza el bienestar de sus colaboradores a través de un entorno de confianza flexible y amigable. Busca centrarse en desarrollar las habilidades de cada uno, sembrando la semilla de la proactividad y el liderazgo. Esta cultura se basa en la formación de las relaciones humanas y se focaliza en crear un ecosistema que integre hábitos, motivaciones, valores y creencias, promoviendo la comunicación empática entre los miembros.

No es novedad aquellas empresas que llevan muchos años bajo una misma práctica experimenten el llamado “abismo cultural”, que significa la sensación que acontecen varios de sus colaboradores, quienes en un principio se sentían motivados, comiencen a experimentar aspectos incómodos o retrógrados de la misma organización y requieran un nuevo modelo que no siga amenazando con su proactividad. Pues, no hay “gente mala” sino tal vez “mal guiada”. Entonces es ahí donde los líderes tienen la responsabilidad de procurar que la felicidad y motivación de las tareas del día a día sigan latentes en los colaboradores quienes conforman la empresa.

Una forma para evitar el temido “abismo cultural” es implementando una cultura que preste atención a su equipo, que siga el progreso de los mismos y los escuche para no dejar pasar sus reconocimientos y óptimos resultados.

En este artículo te compartimos algunos puntos claves que tu empresa puede adoptar para promover buenas prácticas y que en #MobySuite ¡Nos funciona muy bien!
 

• Equipo colaborativo

Motiva el trabajo en equipo y anímalos a opinar sobre diferentes temas, invitándolos a tener una participación activa sin importar su posición en la empresa, abriendo como consecuencia una lluvia de ideas colaborativa y observaciones innovadoras que alimentan los objetivos estratégicos. Recuerda siempre dar opiniones objetivas y de buena manera.
 

• Flexibilidad

Tener el poder de adaptarse a cualquier entorno gracias a la flexibilidad de tu empresa significa romper barreras. Ofrecer nuevas metodologías y horarios de trabajo flexibles harán que tus colaboradores estén dispuestos a trabajar con voluntad desde cualquier lugar en horas convenientes para las dos partes.
 

• Comunicación omnicanal

Tomate el tiempo de formar a tus empleados en un ambiente positivo y asegúrate de que sepan que tú los valoras. El saber explicar la importancia de sus funciones promoverá comportamientos positivos.

Crea espacios de trabajo donde tu equipo se comunique efectivamente de forma fácil y rápida, esto va a permitir que todos estén conectados. Apóyate en las herramientas tecnológicas para compartir sus tareas y procesos de trabajo durante la jornada laboral. Busca aquellas que creas se adaptan mejor a tus necesidades organizacionales.
 

• Limitar la burocracia

Apostar por una estructura plana o un manejo organizacional de vanguardia evita las jerarquías que demandan procesos engorrosos de control. Crear nuevos puestos para “facilitar” la administración lo único que logra es que exista más burocracia. En cambio, la productividad y el flujo de trabajo funciona mejor cuando no se tiene que pasar por un sinfín de jefes, directores o procesos lentos.

• Recompensas

Crea dinámicas que refuercen el vínculo entre los colaboradores y se motiven a construir un equipo unido y productivo que trabaje siempre para el beneficio de la empresa, a través de distintas actividades grupales, celebración de fechas especiales y reconocimientos motivacionales, que sean de interés para promover el sentimiento de compromiso.

 

La cultura de una empresa es la columna vertebral de cada proceso y departamento. Por esta razón, definir la personalidad y la organización lineal en base a valores que velen por el bienestar de todas las personas que la conforman, dará como resultado un equipo de trabajo apasionado y equilibrado.

Esperamos que estos puntos claves te sean de utilidad para gestionar mejor la cultura organizacional de tu empresa.


Fuente: Redacción MobySuite