La transformación digital llegó al sector inmobiliario y pretende generar cambios radicales a corto, mediano y largo plazo. Dentro de los avances tecnológicos, está el Big Data, un proceso de recolección de grandes cantidades de datos y su análisis correspondiente con el propósito de encontrar información oculta y patrones recurrentes para mejorar y agilizar diversos procesos en los negocios actuales.

Por ejemplo, la empresa de telefonía T-Mobile recopiló datos procedentes de los servicios de atención al cliente y de quejas en RR.SS donde posteriormente fueron capaces de asignar un valor propio a cada usuario a través de ofertas personalizadas. Con esta táctica, se consiguió reducir el cambio de compañía en un 50%, un éxito rotundo teniendo en consideración que la portabilidad es uno de los principales problemas para las empresas de telefonía.

En Estados Unidos, se realizó un programa de detección del crimen cimentado en el análisis de datos, con este plan se permitió identificar durante qué momentos existen mayores probabilidades de que se cometa un crimen, como en verano o eventos masivos.

El Big Data va a ser la gran apuesta para el sector de la vivienda y construcción en los próximos años, de hecho se puede ver que en algunos países este procedimiento ya existe.

No obstante, hay que distinguir que en el rubro inmobiliario el Big Data no es solo una mera recopilación de datos, más que eso es un análisis de los mismos. A raíz de esto, es que han surgido conceptos como análisis predictivo, que se basa primordialmente en adelantarse a la competencia con la identificación de potenciales oportunidades de negocio.

Nuevamente en el contexto estadounidense, podemos analizar el caso de la Inmobiliaria Twiddy, desde su departamento de Comunicaciones y marketing establecieron un plan de Big Data, tanto de clientes, proveedores y colaboradores. Así, la corporación pudo optimizar sus recomendaciones, cruzando sus propios datos con los del rubro inmobiliario y las tendencias.

En el funcionamiento interno, el Big Data benefició bastante a Twiddy, ya que el análisis realizado por esta inmobiliaria les permitió identificar errores en los procesos internos y han conseguido un ahorro aproximadamente de 50.000 dólares.

Este sistema está correlacionado con los CRM, ya que aquel software se transforma en una fuente masiva para el big data, y este a la vez ofrece la información precisa para una estrategia de Customer Relationship Management.

Con la gran cantidad de información que recopila el Big Data, las empresas del sector inmobiliario pueden segmentar a sus clientes y conocer comportamientos puntuales, con el objetivo de personalizar ofertas, brindar promociones, seleccionar los mejores medios de entrega de productos, entre otros.

A través de estas herramientas, la inmobiliaria podrá ofrecer mejores experiencias a los clientes, resultado del análisis de los datos que genera la actividad de su equipo.